Últimamente, cuando las noticias son cada día más negativas, cuando la vida que conocemos está más restringida, cuando la incertidumbre acerca del futuro es cada vez mayor, cuando las reuniones sociales son más limitadas, las ganas de cancelar o no realizar celebraciones son muy muy grandes…sin embargo, estas celebraciones y especialmente las que marcan hitos y logros importantes son más necesarias que nunca para levantar el ánimo y retomar la esperanza de un mejor futuro.

Tomarnos un tiempo para concentrarnos en la familia, los amigos y los logros, aún cuando no podamos estar juntos de la forma que nos gustaría, nos ayuda a disfrutar de placeres simples y dejar de lado el negativismo que nos rodea.

Sin importar si celebramos acompañados o de forma virtual, una decoración bonita acorde al motivo de la celebración, un aperitivo, una rica comida, nos ayudará a celebrar ese momento especial y recordarlo por siempre en positivo a pesar de las circunstancias.

No debemos restar importancia a cualquier evento que en condiciones de normalidad hubiésemos festejado: ¡cumpleaños, graduaciones, promociones laborales, la compra de un piso o casa, una mudanza, un coche nuevo! Todos es tos logros van más allá de lo material y es necesario celebrarlo para sentirnos psicológicamente satisfechos y plenos.

El día de mañana cuando todo pase (porque va a pasar), estaremos felices de tener recuerdos y no haber dejado pasar esos momentos que no volverán, incluso seguramente serán más especiales que aquellos vividos en tiempos normales.